Entre Suspiros y un Café
Crecimiento

Cierra los ojos

Dicen que la vida se trata de cerrar los ojos y de abrir las manos.

De cerrar los ojos para pensar mejor. Para no distraerte con la realidad, con lo que ves o lo que crees que estás viendo. Para no perder el tiempo con ruidos que no vienen al caso. Con todo aquello que sea accesorio, molesto o innecesario.

calma

Cerrar los ojos para tomarte un respiro, para pensar dos veces las cosas y para decidir que vas a empezar. O retomar lo que te habías dejado a medias sin saber por dónde continuar. O cómo. Para decidir con calma, sin prisas, sin presiones.

Para tener unos minutos solo para ti.

Cerrar los ojos para sentir mejor. Para aislarte del mundo, dejar el resto fuera y preguntarte qué quieres. Para conectar contigo, con lo que eres, con lo que quieres ser. Con lo que te hace falta, con lo que te hace daño, con lo que está de más. Para notar tu piel de gallina y saber por qué.

Para dejarte llevar por la emoción sin miedo a perderte.

Cerrar los ojos para centrarte en lo que de verdad necesitas y dejar en pausa todo lo demás. Para poner las cosas en su sitio y a ti en primer lugar. Para ordenar ideas, memorias y sentimientos. Para limpiar bien, tanto fuera como dentro.

Cerrar los ojos, aunque lo veas todo oscuro. Y borroso. Aunque no veas nada de nada y temas chocar con algo. O con alguien. Aunque sientas que pierdes el equilibrio, que tus otros sentidos están dormidos y que el miedo te paraliza antes de empezar siquiera. Pero encontrar el modo de andar. De orientarte. Y de no chocarte contra nada ni nadie.

Cerrar los ojos con la esperanza de que algo cambie una vez los abras. Para encontrar una salida, una respuesta, un nuevo paso. Para buscar la manera de cambiar de escenario, de acercarte, de ver con más nitidez lo que hoy no hay manera de enfocar. Para decidir dónde poner el foco.

Para animarte a salir, por fin, a escena. Y a improvisar si hace falta.

Cerrar los ojos cuando no sepas qué esperar. Cuando necesites armarte de paciencia, de fe, de motivos para continuar. Cuando no sepas bien lo que buscas, pero sientas que algo te falta. Cuando te hayas cansado de buscar fuera.

suenos

Cerrar los ojos para poner el freno. Parar todo lo que te lleva  a la carrera, con la lengua fuera y sin aliento. Para eliminar todo aquello que te hace perder el sentido, para mal. Todo lo que ni debería estar, ni deberías consentir y que está en tus manos erradicar.

Para borrar de tu vida todo lo que te hace mal.

Cierra los ojos para decidir si están donde quieres estar o si ha llegado el momento de moverte. De si vas por buen camino o te has torcido en algún punto. De si haces lo que quieres o lo has dejado todo para mañana. O cuando sea. De si eres feliz con lo que eres, con lo que tienes, con lo que sientes. O si debes ponerlo todo patas arriba y cambiar las vistas.

Y abre los ojos cuando así lo sientas.

Y ponte manos a la obra.

 

Patricia Ayuste.

Publicaciones relacionadas

13 Comentarios

  • Responder
    elcorazonenlamano
    7 abril, 2016 a las 9:30 pm

    No tengo palabras para describir lo que he sentido a leer éste post. Me quedo con todas las palabras, pero sobretodo con ésta frase “Tenemos esa bonita costumbre de esperar siempre algo”, me he sentido especialmente identificada.

    Saludos 🙂

    • Responder
      Entre suspiros y un café
      8 abril, 2016 a las 4:51 pm

      ¡Muchas gracias! Lo escribí tras la sensación que yo misma experimenté y que tanto me ha servido.

      ¡Un beso enorme! Y a esperar cosas buenas 😉
      Patri.

  • Responder
    El pensadero de Yai
    7 abril, 2016 a las 10:42 pm

    Buena entrada, da qué pensar. Saludos!

  • Responder
    Conxita Casamitjana
    8 abril, 2016 a las 3:51 pm

    Hola, no conocía tu blog, he llegado por curiosidad desde el de otra persona a la que sigo.

    Me ha sorprendido esta reflexión que nos propones, ese hacernos pensar en cómo nos vemos de aquí a cinco años, en cómo miramos y si nos gusta lo que vemos…interesante.
    A mi me gusta pensar que está en nuestra mano el cambiarlo o no. Generar opciones al final es lo que nos hace libres para decidir, porque si creemos que las cosas son de una manera determinada, sin posibilidad de cambiarlas…es agobiante.

    Gracias por este ratito de reflexión,
    Un saludo

    • Responder
      Entre suspiros y un café
      8 abril, 2016 a las 4:55 pm

      ¡Hola Conxita! Es un ejercicio de reflexión que ayuda a visualizar metas. Y coincido contigo en que está en nuestras manos, o al menos gran parte, el poder cambiar las cosas, sobre todo las que no nos gustan para tratar de conseguir lo que queremos.

      ¡Feliz fin de semana!
      Patri.

  • Responder
    elbauldelasvidas
    10 abril, 2016 a las 7:17 pm

    ¡Yo me he visto escribiendo! 🙂 Y espero que tú también para seguir leyendo textos tan bonitos como éste.

    ¡Un besazo y buena semana!

    • Responder
      Entre suspiros y un café
      10 abril, 2016 a las 7:59 pm

      ¡Enhorabuena Dani! Como decía en el texto, hay personas que no visualizan nada, conseguirlo ya es un logro y sin encima descubres que ya estás encaminado a ello… ¡Oleeee!

      Un beso enorme 🙂

  • Responder
    Ángel Caído
    24 abril, 2016 a las 7:26 pm

    Me ha gustado mucho este post, está muy bien descrito y te hace llegar a sentir sin ni siquiera dejar de leer, que has cerrado los ojos y estás viendo todo eso que insinuas.

    • Responder
      Entre suspiros y un café
      25 abril, 2016 a las 8:46 pm

      ¡Me alegra! Muchas veces es difícil y a no todo el mundo le gustan las meditaciones de este estilo, pero si consigues dejarte llevar y fluir, puede ser una bonita experiencia. Me alegra que la haya sido en tu casa.

      ¡Un beso!
      Patri.

  • Responder
    Elena
    9 mayo, 2016 a las 6:12 am

    Gracias

  • Responder
    Gracias – Entre suspiros y un café
    31 diciembre, 2016 a las 6:20 pm

    […] en cada poro de mi piel. Desde el minuto cero, hasta el minuto final. Porque hoy cuando te vayas y cierre los ojos, veré pasar todos y cada uno de los increíbles momentos  que hemos compartido. Que me has […]

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.